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GUAYACANES, DE CUBA

Interés internacional por servicios cubanos sobre desechos peligrosos

Lino Luben Pérez, Agencia Cubana de Noticias (ACN)

   El Centro de Protección e Higiene de las Radiaciones (CPHR), de Cuba, anunció en en La Habana que recibió solicitudes de varios países latinoamericanos sobre su experiencia en la aplicación de la gestión de desechos peligrosos no convencionales.


  Representantes de Costa Rica, Ecuador y Panamá mostraron su interés en el conocimiento del manejo de tales residuos, informó a la ACN José Luis Peralta Vital, jefe de los Servicios Medioambientales del CPHR.


   Mencionó también la existencia, en ese sentido, de un Proyecto de colaboración con la República Bolivariana de Venezuela en tres grandes hospitales de esa nación, con resultados satisfactorios.
  Los procedimientos con estos elementos no radiactivos son un asunto muy novedoso a nivel internacional y Cuba comenzó a accionar sobre ellos a partir de la segunda mitad de los años 90, recordó la fuente.


  Peralta Vidal indicó que el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) encargó a su institución ocuparse de los trámites correspondientes por pertenecer desde 2008 a la Comisión de Prevención y Control de la Contaminación.


  Apuntó que por más de ocho años, su institución ha desarrollado asesoría para la gestión segura de los desechos peligrosos y productos químicos caducos y ociosos en más de 30 entidades nacionales.  


  Sin embargo, aclaró que en su Resolución 139 de 2009, el CITMA estableció el reglamento para su manejo integral y es de obligatorio cumplimiento por todas las empresas de la nación.


  Precisó que el servicio como tal es cobrado a nivel de institución, mediante un contrato entre las partes y su ficha de costo recoge aspectos técnicos, aunque en el caso de realizarse fuera de La Habana, incluye los costos de hospedaje, alimentación, transporte y otros del personal.


   Entre los desechos peligrosos generados en la mayoría de las entidades se encuentran los aceites usados, baterías de autos en desuso, luminarias fundidas, chatarra electrónica y de otros equipos, así como también de procesos productivos.
    

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